¿Qué importa quienes somos?
Alguien podría preguntar por qué vale la pena identificar al pueblo de Dios, como intenté hacer en los artículos anteriores. Estas verdades tienen sus implicaciones prácticas. De reto para nosotros mismos, podríamos ver, ya sea como individuo o comunidad si tenemos los rasgos distintivos del pueblo de Dios. En términos prácticos creo que implica que la relación política con la nación de Israel se tiene que determinar de otro fundamento que simplemente decir que Dios les dio la tierra y que nosotros tenemos que apoyarlos o Dios nos maldecirá. Y también sirve como un gran consuelo. Pablo dice: Y si vosotros sois de Cristo, ciertamente linaje de Abraham sois, y herederos según la promesa (Gálatas 3:29). Si somos linaje de Abraham eso significa que las promesas hechas a Abraham (que se cumplen en Cristo) aplican a nostros; por lo tanto, nosotros somos herederos. Hay una herencia incorruptible, incontaminada e inmarcesible, reservada en los cielos para vosotros (1a de Pedro 1:4). Puede que somos pobres; pero siendo parte del pueblo de Dios, somos herederos de una riqueza incontable.
Post a Comment