« Home | Filipenses 2 y las Dos Naturalezas de Cristo » | Apoyo textual para las dos naturalezas de Cristo » | Cristo, Dios y Hombre » | De la Risa a la Ira --Salmo 2 » | A otros, pastores y maestros (Efesios 4:11) » | La Felicidad y El Contraste » | ¿Por qué se ríe Dios? Más pensamientos del segundo... » | ¿Por qué se ríe Dios? Pensamientos del segundo Sa... » | La Bíblia enseña que Dios creó el mundo, y todo lo... » | El libro de Eclesiastés muchas veces se considera ... »

La Distinción entre Creador y Creación

Los que leen este blog ya se habrán dado cuenta del valor que pongo a la Confesión de Fe de Westminster. Los teólogos de la asamblea expresaron la idea que está en mi título en estas palabras:
La distancia entre Dios y la criatura es tan grande, que aún cuando las criaturas racionales le deben obediencia como a su Creador, sin embargo, ellas no podrán nunca tener plenitud con El como su bienaventuranza o galardón, si no es por alguna condescendencia voluntaria por parte de Dios, habiéndole placido a Este expresarla por medio de su pacto.

Es obvio por el dicho de Génesis 1:26,27 que Dios creó al hombre que existe esta diferencia. El hombre es incapaz de crear; no existe de manera autónoma; es contingente y dependiente. Pero Dios es absolutamente independiente de su creación. Considere el magnífico pasaje de Pablo, en Romanos 11:33-36. Habiendo expuesto los propósitos de Dios, su vasta plan para la salvación, su sorprendente manera de proceder, Pablo tiene que adorar ante un Dios tan vivo, tan real, tan inesperado, y dice así: ¡Oh profundidad de las riquezas de la sabiduría y de la ciencia de Dios! ¡Cuán insondables son sus juicios, e inescrutables sus caminos! Porque ¿quién entendió la mente del Señor? ¿O quién fue su consejero? ¿O quién le dio a él primero, para que le fuese recompensado? Porque de él, y por él, y para él, son todas las cosas. A él sea la gloria por los siglos. Amén.
Es obvio que este texto presenta la diferencia entre Dios y los hombres: nosotros no hemos entendido su mente, no le hemos aconsejado, no le hemos dado primero. Y esto es cierto porque de Dios son todas las cosas. Obviamente existió antes de que ellos existieran. No depende de ellos; su existencia no es basada en la contingencia de la existencia de otras cosas. En este texto nos encontramos con la independencia de Dios; es absoluto y no necesita nada fuera de sí. Esta verdad se expresa en términos poéticos dirigido a eliminar el orgullo humano en Salmo 50:12: Si yo tuviese hambre, no te lo diría a ti; porque mío es el mundo y su plenitud. Encontramos la misma verdad, nuevamente anunciada por Pablo en Hechos 17:24,25: El Dios que hizo el mundo y todas las cosas que en él hay, siendo Señor del cielo y de la tierra, no habita en templos hechos por manos humanas, ni es honrado por manos de hombres, pues él es quien da a todos vida y aliento y todas las cosas. Y David confiesa esta verdad en referencia a nuestro servicio de Dios, cuando dice: Pues todo es tuyo, y de lo recibido de tu mano te damos (1a de Cronicas 29:14b).
Al comenzar a pensar de esto puede parecer algo desconsolante. Dios no nos necesita; no lo podemos proporcionar nada. A lo mejor es tan diferente que nosotros que no tenemos importancia en su vista. Pero hay consolación en esta verdad: a final de cuentas, hay algo incambiable, algo que no podemos afectar. El hecho más básico del universo no depende de nosotros; en toda desesperación, angustia o presión es bueno saber esto: Dios no es afectado por esas circunstancias o por mis sentimientos. Sigue siendo Dios, no obstante lo que haga yo.

About me

  • Ruben
  • D.F., Mexico
  • Soy un cristiano, dedicado a la teología reformada, como la mejor expresión de la enseñanza de la Bíblia, y por lo tanto el sistema teológico que más glorifica a Dios. No soy yo quien aparece en la foto en mi perfil. Pero me gusta como se ve de todos modos.
My profile
Powered by Blogger
& Blogger Templates
Hosted by WebsiteMaven